Te contamos cómo llegar hasta esta reliquia arqueológica rodeada de un encantador paisaje natural.
Si bien es una de las mayores reliquias arqueológicas de la provincia, muy pocos tucumanos saben de la existencia de esta enorme piedra grabada que se encuentra en San Pedro de Colalao. La roca está ubicada en una meseta rodeada por vegetación, atravesada por ríos y rodeada por cerros. En medio de ese bello paisaje natural se destaca esta impactante piedra de 3 metros de largo, 2,30 metros de ancho y más de un medio y metro de alto, enterrada unos 2 metros por debajo del nivel del terreno.
No sólo el tamaño captura la atención de quien la conoce sino que esta roca presenta 45 figuras que muestran contornos de aves y otros animales tallados en sus caras laterales. Aunque se desconoce su significado, se induce que está relacionado con cultos a la fertilidad y las cosechas. Esta enorme roca descubierta en 1877 por el profesor Inocencio Liberan, es parte de lo que se denomina petroglifos de "ovejería", y es la más importante de las tantas piedras talladas que se encuentran en todo este territorio cercano a San Pedro de Colalao.
Para llegar hasta esta atracción arqueológica hay que caminar unos 9 kilómetros por calle Las Heras hacia el sudoeste desde la villa de San Pedro de Colalao. Si bien desde el centro de la villa turística son sólo una hora y media de caminata hasta Piedra Pintada, se recomienda ir acompañado por un guía, ya que se trata de una travesía de mediana dificultad en la que hay que atravesar varias veces el lecho del río Tipa.
Para mayor información llegarse a la oficina de Turismo de San Pedro de Colalao.
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